La próxima vez que tomes una tarrina de helado, intenta dibujar todos sus ingredientes. Si lo consigues, enhorabuena. Eso significará que te estás comiendo un Pink Albatross. Aunque es muy probable que tú ya lo supieras por:

  • Su sabor intenso y auténtico
  • Lo cremoso de su textura
  • Lo que estabas disfrutando cada cucharada
  • Ah, y el picudo rostro de Dandy, el más viajero de los albatros

“Si un ingrediente no lo podemos dibujar o no es entendible fácilmente, no lo vamos a utilizar” . Lo dicen Pepe Biaggio y Luke Saldanha, fundadores de Pink Albatross. Por eso son unos helados con componentes naturales 100 % veganos. Puros y reconocibles. Con una etiqueta sencilla que no necesita traducción. En definitiva, helados aptos para todo el mundo (sí, incluso para esa persona que estás pensando). Pueden ser veganos, flexitarianos o personas que no quieren ingredientes artificiales. Pueden ser seres humanos que se preocupan por llevar una alimentación mejor, menos procesada (los distinguirás porque leen las etiquetas de los alimentos). Pueden ser simplemente personas que disfrutan comer helados auténticos que tengan sabores intensos y texturas increíbles. ¡Ah! Y también personas que aman las cosas sencillas de la vida (pisar hojas secas, oler un libro nuevo, sonreír).

Los helados Pink Albatross solo tienen los ingredientes imprescindibles (los justos para que nunca quieras dejar de comerlos desde que los pruebas. Pueden contener trazas de sésamo, leche y frutos de cáscara).

Y ahora vamos a contarte lo que no llevan, que también importa:

  • No contienen lácteos (ni leche de vaca ni grasas animales) ni gluten (por eso son aptos para veganos, vegetarianos y flexitarianos).
  • No contienen ningún ingrediente artificial.
  • No llevan potenciadores de sabor ni aromatizantes.

Ice Cream Rebellion Vale, ya tenemos claro que los disfrutones son el público objetivo de Pink Albatross. Personas que se divierten con cosas importantes de la vida, como discutir de política comiendo un helado.

O corriendo para darle el primero al botón del ascensor. Pero resulta que estos helados también son para los innovadores. Los inconformistas. Los puristas (los que quieren eliminar lo que les sobra en el día a día para quedarse solo con las cosas que merecen la pena). ¿Y estas personas quiénes son? Son los que quieren ser parte de la Ice Cream Rebellion.
“El sistema alimentario está roto y tiene que cambiar. Muchos de los problemas de salud, medio ambiente y el respeto a otros seres vivos (ya sean personas o animales), tienen su raíz en nuestra forma de consumir y en cómo nos alimentamos. Si eres como nosotros y eres de esas personas que cuando vas a hacer la compra das la vuelta a todos los envases para ver si los ingredientes están derivados de los animales, o contienen alérgenos o tienen nombres impronunciables, o peor aún, tienen E’s seguidas por números, eres como nosotros”, explican los fundadores de Pink Albatross. “Conviértete en un Food Fighter y evoluciona la forma de alimentarte”.

Los cerebros (no congelados) tras Pink Albatross Detrás del sabor intenso y la textura increíble de los Pink Albatross están Pepe Biaggio y Luke Saldanha. De origen argentino e indio, han desarrollado sus carreras profesionales entre Brasil, Francia, Reino Unido y Estados Unidos. Esta es una de esas historias que te va a gustar: Decidieron dejar sus puestos de responsabilidad en la industria financiera y lanzarse a la mayor aventura de sus vidas; “dar la vuelta al mundo del helado, que era mas difícil que dar la vuelta al mundo comiendo helado”.

Así que repensaron sus vidas. Estudiaron, probaron, formularon y reformularon durante horas y horas hasta el agotamiento. Y así dieron con unos helados que no solo están ricos (aunque vaya si lo están), sino que además  tienen una lista de ingredientes limpia (entendible y reconocible) y apta para personas con restricciones alimentarias.

Pink Albatross se ha convertido en la primera start-up española seleccionada por la incubadora de ProVeg International, un proyecto de acelaración de negocios de nueva creación con potencial de transformar la cultura alimentaria mundial. Ha sido además la ganadora de los dos premios que ProVeg concede en su Start-up Demo Day (audiencia y jurado).

Los helados Pink Albatross pueden comprarse en más de 110 puntos de venta en España: retail especializado (tiendas veganas, de especialidad o herbolarios) y en restaurantes (veganos y no veganos). Pero en 2021 se ampliará la distribución a grandes superficies como Ametller Origen en Catalunya o Spar en Canarias. Y, a corto plazo, también al mercado internacional.

Están disponibles en tarrinas de 480 ml (PVP recomendado 6,90 euros), y en siete sabores (y se acaban de lanzar dos nuevos en edición limitada, Pistacho y Choco late y Café Arábica).