La Asociación Española de Cirugía Estética pide vigilar la correcta administración de inyectables como el botox y ácido hialurónico.
Hablamos de los conocidos botox o ácido hialurónico, pero también de una amplia gama de ofertas que combinan otros productos como la hidroxiapatita cálcica. Para Menéndez Graíño debemos desconfiar ante su empleo e implantación en sitios inadecuados (por ejemplo, fuera de clínicas medicas) o ante precios muy bajos. Las falsificaciones, añade, están a la orden del día.
Para Moisés Martín Anaya, secretario general de AECEP, la única manera de que el paciente no caiga en estos fraudes que pueden suponer un serio problema para su salud es acudir a un profesional de confianza, puesto que el ciudadano no tiene por qué conocer los productos. La confianza hacia su médico le otorga la tranquilidad ante la técnica . Martín Anaya recuerda que no existe una titulación específica para realizar un tratamiento médico estético y que cualquier doctor puede pinchar botox. Por este motivo apela a la ética profesional y recuerda que los dieciocho años deberían ser el límite de edad para la belleza médica en clínica.